White lion's Lady
Tina St. John
Ballantine books 2001
White
lion's lady es una novela de caballeros -la primera de una trilogía
medieval- que nos adentra en una época histórica convulsa en la que
las lealtades cambian de bando, las tierras y títulos son comprados
a cambio de pactos y apoyos a la corona o sus enemigos.
Cuando
la novela comienza, Inglaterra, gobernada por el rey Ricardo, se
divide entre quienes le son leales y quienes conspiran en su contra.
En mitad de esta encrucijada de alianzas y traiciones, de caballeros
y vasallos, nace la historia de amor de Isabel de Lamere y Griffin de
Droghallow.
Para
poner en antecedentes cabe mencionar que, años atrás, durante el
reinado de Enrique II, el señor de Lamere fue acusado de traición.
En reprimenda fue desprovisto de sus tierras, títulos y privilegios
y, por supuesto, sentenciado a muerte. Su matrimonio fue anulado, sus
hijas proclamadas ilegítimas. La esposa, rota de vergüenza y dolor,
regresó a su Francia natal donde ha ido consumiéndose poco a poco.
Ahora,
tras su muerte, Isabel de Lamere ha heredado sus propiedades.
Corre
el año 1189 y el rey Ricardo decreta que los feudos de Lamere y
Montborne se unan. Así, Isabel abandona el convento en el que ha
vivido recluida durante años para cumplir con las órdenes de su
rey. Poco valor tienen los deseos de una joven, menos aún el de una
cuyo padre fue acusado de traición a la corona. Pero a Isabel la
mueve el deseo de reunirse con su hermana menor, Maura, a la que no
ve desde que fueran separadas y enviadas a conventos diferentes. Y
eso es lo más importante para ella.
Cuando
emprende el viaje que la llevará a conocer a su prometido, Sebastian
de Montborne, y contraer nupcias, es secuestrada por una guarnición
de hombres enviados por el propio príncipe Juan para impedir el
matrimonio.
Entre
ellos se encuentra Griffin de Droghallow, a quien en principio no
reconoce, pero de quien ha conservado un viejo medallón desde que,
años atrás, cuando era nada más que una niña, le salvara la vida.
Desde entonces ha idealizado a aquel valiente joven que le juró que
un día sería caballero para defender a los débiles.
En
su fuero interno Griffin no desea ser el héroe de nadie, mucho menos
el de Isabel que, absurdamente, ha hecho de él un caballero de
brillante armadura cuando bien lejos está de serlo. Pero cuando es
traicionado por el hombre al que ha protegido como a un hermano y al
que ha rendido cuentas, aun en detrimento de su honor, no duda en
esbozar sus propios planes para luchar la libertad que tan duramente
ha luchado por conseguir. Pero eso puede significar perder a la única
mujer que se le ha metido bajo la dura coraza con que se ha
revestido.
En
Griffin encontramos a un caballero desengañado, sin esperanzas.
Fue
abandonado cuando era un recién nacido y tomado bajo la protección
del señor de Droghallow quien lo entrenó y lo trató casi como a un
hijo. No había nada más valioso para él que el honor y la lealtad.
Juró fidelidad a Robert de Droghallow y juró que un día sería un
caballero de intachable honor. Pero ahora, años más tarde, poco
queda de aquel muchacho orgulloso y de los principios en los que se
sustentaba.
Las
novelas ambientadas en el medievo tienen algo que me atrae, por ello
al saber que White lion's Lady transcurría en esa época histórica
me animé a leerla. Eso y el que tras el pseudónimo de Tina St. John
no está otra que Lara Adrian.
White
lion's Lady es, desde mi punto de vista, una apasionante y bonita
historia que entrelaza intrigas, secretos y amor. Me ha sorprendido
la pareja protagonista, Isabel de Lamere y Griffin de Droghallow,
pues distan bastante de los típicos personajes que asociamos a estas
novelas.
Isabel
es una joven que ha sido desprovista de su nombre, posición y
privilegios, y recluida en un convento. Griffin de Droghallow es casi
un mercenario que no conoce su verdadero nombre y que ha visto como
poco a poco, año tras año, su alma se iba oxidando e iba perdiendo
esa honorabilidad que lo era todo para él.
Me
es muy difícil describir qué me ha transmitido esta maravillosa
novela. Me ha parecido una historia muy bonita, pues desde el
prólogo, en ese primer encuentro entre Isabel y Griffin, cuando son
unos niños, me atrapó profunda e irremediablemente.
Más
aún al descubrir el marcado contraste entre los pequeños Isabel y
Griffin y los adultos. La necesidad de desvelar los interrogantes que
rodean esa gran laguna que el tiempo ha creado me impelía a seguir
leyendo.
Cómo
no sentir curiosidad por descubrir que ha propiciado esos cambios y,
sobre todo, como dos personas que no son nada más que peones en esta
red de traiciones y secretos pueden salir indemnes y proteger ese
amor tan frágil que los une.
Sin
excederse con explicaciones y relatos históricos, la autora delinea
una época y unos hechos que son el marco en el que nace el amor de
Isabel y Griffin. Y combinando algunos rasgos tan atractivos como un
héroe con un alma atormentada y una protagonista valiente y de buen
corazón, da pie a una bonita historia que transcurre en una época
apasionante.
Hacía
mucho que no leía una novela medieval de este estilo. Un estilo que
tal vez no se exceda en detalles que hacen de ella una historia del
todo realista pero sí esboza cómo era la época y que vicisitudes
rodean a esta pareja que deberá enfrentar mil y un obstáculos. Pues
no se puede olvidar que Isabel está prometida a otro y que Griffin
es considerado un traidor a la Corona, pues formó parte de la
guarnición de hombres, aliados con el propio príncipe Juan, que han
secuestrado a la heredera de Lamere. Esos se convierten en grandes
obstáculos a superar.
Me
ha emocionado como, capítulo tras capítulo, la coraza que rodea a
Griffin se ha ido resquebrajando, y como la desconfianza de Isabel
desapareciendo. Después de todo, en su corazón, sabe que ese hombre
endurecido que dice haber perdido su honor es aquel muchacho al que
convirtió en su caballero de brillante armadura.
Puede
que White lion's Lady no pase a ser una de esas novelas que pasan a
formar parte de las grandes historias de amor ambientadas en el
medievo, pero es desde mi punto de vista una bonita historia que te
cautiva, tanto los sentimientos que provoca, como por la época en
que acontece, envuelta en aventuras e intrigas. Así, al menos para
mí, es imposible no caer derrotada ante el asedio del león blanco y
su dama en la que es para mí una bonita y emocionante novela.