domingo, 30 de diciembre de 2012

Heartless - Mary Balogh





Heartless
1º Victorian series
Berkley 1995


Dejando un poco de lado sus novelas de La Regencia, en Heartless Mary Balogh sitúa la trama en la época victoriana y nos cuenta la historia de Lucas Kendrick y Anna Marlowe.

Lucas Kendrick, el duque de Harndon, es a primera vista un protagonista del que diría que rompe todos los cánones que se hayan establecidos para el protagonista masculino de una novela romántica. Ni es alto ni musculoso, más bien de estatura y constitución media; no posee una belleza viril ni un rostro esculpido toscamente. Es hermoso. Lleva maquillaje, los cabellos empolvados, no escatima en encaje, bordados recargados ni tejidos de colores vivos; incluso utiliza perfume. Además osa calzar unas botas con tacón rojo y no es extraño percatarse que en una reunión social o baile extraiga de su levita un abanico.
Pero bajo este llamativo y, tal vez, un poco afeminado exterior se esconde un hombre peligroso e insensible.
Lucas Kendrick ha pasado los últimos diez años viviendo en París. Ha regresado a Londres tras la muerte de su hermano mayor, George, puesto que ha heredado el ducado de Harndon. Ha tardado un poco en asumir sus responsabilidades, reticente a abandonar su vida de disipación en Francia.

A ojos de su familia poco queda del joven que ser marchó, envuelto en escándalo y vergüenza. El nuevo Lucas es un extraño que, más allá de su llamativa apariencia, no muestra el menor sentimiento hacia nadie, ni siquiera hacia sus hermanos que lo adoraban.

Víctima de las maquinaciones de su tío Theo, Lucas conoce a Lady Anna Marlowe, una joven de buena familia pero sin apenas fortuna, con la que desean que se case. El nuevo duque de Harndon se considera un hombre sin corazón, incapaz de amar, así que sin pensarlo mucho accede en la convicción de que una esposa no es diferente de otra y, curiosamente, Lady Anna le agrada de una manera especial.

Lady Anna Marlowe ha ido a Londres nada más que a pasar una pequeña temporada. Sus planes no eran otros que acompañar a su hermana Agnes, que se presenta en sociedad a la búsqueda de marido. Tras la muerte de su padre, el hermano de ambas, Víctor, ha heredado el empobrecido condado. Sin apenas dote es hora de que las hermanas Marlowe busquen marido. A causa de un secreto en su pasado, Anna sabe que nunca se casará; su intención es solo la de acompañar a Agnes, pero su madrina, haciendo de casamentera, le tiende una pequeña emboscada para que conozca al nuevo duque de Harndon.
Su apariencia tan atípica entre los nobles ingleses atrae a Anna desde la primera vez que se ven y, pese a todas las razones que deberían obligarla a evitar al duque, cuando éste le pide que se convierta en su esposa accede.

El matrimonio no comienza muy bien, pues tras la noche de bodas Lucas cree haber sido víctima de un engaño por parte de Anna. Así que una alianza que se presagiaba agradable y amistosa se vuelve fría y distante. Y cuando se trasladan a la casa ducal, donde viven las dos duquesas viudas -la madre y cuñada de Lucas- y sus hermanos menores, la convivencia entre los recién casados no mejora de inmediato. No obstante con el paso de los meses, en parte por sus obligaciones, Lucas y Anna van acercándose el uno al otro, con cautela y miedo al principio, pero con el transcurso del tiempo parece alcanzar cierto entendimiento entre ellos. Sin embargo, en el pasado de ambos hay sombras muy alargadas que oscurecen el futuro que se abre ante la pareja.

Pasada la sorpresa inicial que me produjo el protagonista masculino, la novela me ha enganchado de principio a fin. En algunos aspectos pudiera parecer que estamos ante una novela igual a tantas, pero no es así. No es solo por Lucas Kendrick, sino porque se trata de una historia emocionante y maravillosamente romántica que va mostrando, paulatinamente, como son Anna y Lucas, más allá de lo que parece en principio.
De las novelas de Mary Balogh me gusta ese punto original e imprevisible que encuentras en una historia que a priori puede parecer “otra más de La Regencia”. En Heartless cambia la época, pues transcurre en plena época victoriana, pero se mantiene ese halo incierto y un poco oscuro que rodea a sus protagonistas.

Creo que indudablemente es Lucas Kendrick quien acapara todas las miradas. Para quienes pueden sentirse repelidas a leer esta historia por la descripción que se hace de Lucas, les diría que no se dejen engañar por su apariencia. Además, después de todo es un noble que sigue de manera escandalosa los dictados de la moda francesa. Pero debajo de eso, esconde mucho más.
De Lucas se dice que no tiene corazón. Él mismo lo repite a menudo. Tras los hechos acontecidos años atrás, cuando era un joven ingenuo que aspiraba a la iglesia y a casarse con su prometida, algo murió en su interior. Sus hermanos creen que fue su corazón.

Más allá de la preciosa historia de Anna y Lucas, una pequeña parte del peso de la novela recae sobre la complicada relación que mantiene con sus hermanos. Ambos son más jóvenes y lo recuerdan como el hermano cariñoso y protector que era antes de marcharse a París. No lo reconocen en ese extraño de cabellos empolvados, gesto serio y con maquillaje.

Además Heartless nos cuenta la incipiente relación entre Ashley, el hermano menor de Lucas, y Emily, la hermana menor de Anna que es sordomuda, y es una jovencita dulce e inocente que es casi una niña. Ellos son la pareja protagonista de Silent melody. Pero es en esta novela donde somos testigos de como se conocen y como poco a poco se fragua una relación que tendrá su continuación.

Pero la novela contiene mucho más que una historia de amor y otra que apenas brota, pues esos secretos del pasado, tanto de Lucas como Anna, se desarrollan en una subtrama un tanto turbia que, evidentemente, alcanza a los protagonistas principales haciendo que la lectura no decaiga en ningún instante.

Evidentemente no voy a contar cuáles son esos secretos ni quienes son esas personas que acechan la felicidad de Anna y Luke, pero sí diré que, con ello, en mi opinión, la novela combina intriga y amor de una manera muy atractiva. Te engancha, te atrapa y te va mostrando, poco a poco, esos secretos obligándote a permanecer pegada al libro. También, por supuesto, para descubrir si finalmente Anna y Lucas tendrán su final feliz.

Heartless es una novela que se publicó en 1995, pero en realidad no he notado que, en comparación con otras publicadas en estos últimos años, sea peor o más floja. Al contrario, me ha gustado muchísimo, incluso más que otras más nuevas. Es una historia que combina algunos de los elementos que podemos encontrar en otras novelas en apariencia similares, pero el resultado es diferente. Esa diferencia en parte puede que se deba a Lucas Kendrick, un protagonista atípico, pero también se debe a que es una historia increíblemente romántica y conmovedora: la de un hombre que se cree sin corazón y una joven poco virtuosa. Como fuere a mí me ha emocionado página tras página y al llegar al final me ha apenado dejarlo. Pero, por suerte, queda la historia de Emily y Ashley...

martes, 14 de agosto de 2012

Skin deep - Pamela Clare


















Skin deep 
I-Team After hours (5.5 I-Team)
Ed. Kindle
Mayo 2012

Novela corta



Probablemente como muchas, tras leer Espósame y conocer la vida de Megan, deseé tener la oportunidad de tener entre mis manos una novela dedicada a ella.
A veces los deseos se hacen realidad, pues ésa es la que nos cuenta Skin deep: la historia de Megan Hunter y Nathaniel West.
A ambos se los podría describir como dos personas rotas, pero mientras las cicatrices de Megan están en su interior, fruto de un pasado de adicción y vejaciones, de soledad, prisión y culpabilidad, las de Nathaniel son exteriores y más visibles. Juntos, hallarán el modo de sanar.
O de eso trata esta historia. ¿Lo lograrán?

Megan es la hermana de Marc. Creo que es vital leer antes Espósame para poder entender y comprender al Marc Hunter que nos describe Skin deep. Es, ante todo, un hermano muy protector. Algo por lo que, tal vez, su comportamiento podría resultar un tanto excesivo, pero resulta comprensible si sabes por qué es así con Megan. Bueno... en realidad por qué son así todos, pues Julian también se nos presenta como uno de los protectores de Megan. Por eso hay que leer antes Espósame.

Han transcurrido varios años desde que Megan y Marc se reencontraran. La pequeña Emily tiene cuatro años. En este tiempo Megan ha construido una vida más o menos segura, pero ante todo estable para ella y su hija. Tiene un trabajo, una casa y suele colaborar como voluntaria en un centro de acogida. Es allí donde se encuentra con Nathaniel.

Nat es un ex-marine que regresó gravemente herido de Afghanistan. Una explosión acabó con la vida de varios de los hombres de su escuadrón, así como hirió y mutiló a otros. Nat sufrió graves quemaduras que le dejaron marcado parte del rostro y del cuerpo, de cintura para arriba. A su regreso y durante su convalecencia fue abandonado por su prometida. De modo que ahora el amor, e incluso la mera idea de entablar una relación sin ataduras, no forman parte de su vida, a pesar que su padre desea que conozca a mujeres, salga y deje de recluirse en el rancho familiar.

Tras abandonar las Fuerzas Especiales, Nat ayuda a su padre en el trabajo del rancho, especialmente entrenando a los caballos. Regularmente donan carne del ganado que crían a un centro de acogida y es allí donde Nat ve a Megan por primera vez.
Pese a su reticencia a acercarse a una mujer, no puede evitar sentirse atraído por Megan. A sus ojos es tan dulce y hermosa como un ángel. A causa de sus cicatrices teme acercarse a ella, teme su rechazo pero, inconscientemente, la busca.
Una noche es testigo de cómo un hombre trata de atacarla con un arma en su coche, y no sólo lo evita, salvándole la vida, sino que es herido en la pelea. El héroe que hay en él resurge y, desde entonces, comienza a implicarse en la seguridad de Megan y Emily, que enseguida conquista su corazón. Pese a su negativa, pese a que se dice que sólo actúa movido por su instinto como ex-marine, comienza a sentir como despierta a la vida de nuevo … y como hombre.

Megan cree haber dejado atrás el pasado, un pasado que quisiera poder borrar. Pero cuando una noche alguien de ese pasado irrumpe en su tranquila y segura vida, el miedo la domina. Para su sorpresa cuenta con la protección no sólo de Marc y Julian, sino de ese extraño atractivo y marcado por cicatrices que la salva en el aparcamiento. Y por primera vez en su vida siente atracción por un hombre.

Éste es el punto de partida de esta novela.

Cronológicamente, Skin deep se sitúa después de Breaking point, pero ante todo, como digo antes, creo que es primordial leer antes Espósame.

Lo cierto es que la historia me ha parecido preciosa. Tanto es así que he estado varios días sintiendo mariposillas en el estómago cada vez que pensaba en la novela. Sí, no es muy extensa, pero tampoco te deja la sensación de ser una historia contada de manera apresurada o innecesaria. Al contrario, es esa novela que deseas leer simplemente porque te cuenta la romántica y conmovedora historia de un ex-marine y una joven ex-reclusa con cicatrices difíciles de curar.
Puede que tampoco parezca a priori una historia muy novedosa, sin embargo, en honor a la verdad, no recuerdo ninguna parecida sobre un ex-marine. Sí, de protagonistas con algún tipo de desfiguración. En cualquier caso, creo que la magia de este novela se encuentra en unir a Megan y Nathaniel.

A Megan ya la conocimos en la novela de Marc y Sophie, supimos de su infancia, su adolescencia y como su adicción a las drogas la llevó a la cárcel. Con un bagaje así, me resultaba bastante inconcebible que diera como resultado una novela tan bonita, sin ese halo sórdido o angustioso que, tal vez, cabría esperar.
Es cierto que la aparición de Donny, el hombre que la introdujo en las drogas, supone una amenaza para ella, pues amenaza no sólo su vida sino también la de Emily. Y el que empiece a sentirse atraída, por primera vez, en un hombre le asusta. Pero Nathaniel, precisamente por su pasado, por el alcance de sus heridas y por el sufrimiento propio que ha padecido, se convierte en su mayor apoyo y en alguien, junto al que poder comenzar de nuevo.

Skin deep me ha parecido una novela muy romántica que habla de segundas oportunidades. Segundas oportunidades en el sentido no de retomar una relación de pareja, sino de comenzar una nueva vida. Tanto Megan como Nathaniel cargan con unas terribles cicatrices. Las de Megan están ocultas; algunas de las de Nat también, pero también están las físicas. Juntos pueden encontrar una oportunidad que no esperaban, y que la presencia de Donny amenaza. Como es habitual en esta serie, existe esa vertiente de acción y thriller. No sólo por el pasado y el entrenamiento militar de Nat, sino por todo cuanto rodea al Equipo de investigación, el trabajo de Marc y el Julian.

Además la novela cuenta con un plantel de personajes secundarios de lujo: los ya mencionados Marc y Julian, McBride, Sophie... Tengo que destacar a Jack West, el padre de Nat que me ha parecido un personaje entrañable, cuya presencia siempre actúa como un bálsamo en muchas ocasiones y a la pequeña Emily que con su dulzura y espontaneidad introduce la nota tierna en Skin deep. Más tierna aún si cabe. Gran parte de la novela transcurre en el Rancho Cimarron, el rancho de Jack y Nathaniel West, un entorno precioso que da lugar a escenas inolvidables.

Con Skin deep he disfrutado de una lectura deliciosa, pues narra una historia romántica que ha logrado tocarme la fibra. No sólo por la relación de Nat y Megan, sino por cómo se conocen, se acercan, cómo cambian las cosas... Al tratarse de una novela corta todo gira en torno a ellos, hay pocas escenas de acción. Las justas que requiere la historia.
En mi opinión la de Megan y Nat es una historia de esas que sin una trama muy enrevesada, única y exclusivamente por sus personajes, logra meterse bajo tu piel.

martes, 7 de agosto de 2012

Any man of mine - Rachel Gibson


















Any man of mine
Rachel Gibson
Avon
April 2011



Cuando comienzo una nueva novela de Rachel Gibson imagino una historia divertida, refrescante y sexy porque es el tipo de historias que suele escribir. Tal vez con excepción de The trouble with Valentine's day, que difiere bastante pero que, tal vez por eso, me gustó de especial manera, son características que se repiten en todas y cada una de las que he leído.
En Any man of mine no he encontrado exactamente eso, pero he sido incapaz de despegarme del libro y, al acabar, me ha dejado con una sonrisa en los labios. Porque, en sus páginas, esta novela destila dulzura y romanticismo de principio a fin.

Pero lo cierto es que cuando empecé a leerla tuve la vaga sensación de estar ante una novela que ya había leído. Y no porque se parezca a la de ninguna otra autora. ¿Por qué entonces? Puede que se deba a que Any man of mine tiene algunas coincidencias con Simplemente irresistible que paso a detallar: en ambas los protagonistas son jugadores -obviamente de los Chinooks- que en un momento de sus vidas, con borrachera de por medio, tienen una aventura de fin de semana con mujeres a las que acaban de conocer y a las que, poco después, abandonan. Sí, no es el ideal romántico y sí, ellas son las protagonistas de la novela.
Pero pese a ese sabor con cierta familiaridad que describo, he disfrutado muchísimo con Any man of mine. Me encanta el estilo fresco y desenfadado de Rachel Gibson. Me gustan sus novelas sobre los jugadores de hockey de los Chinooks. Me gustan las novelas de segundas oportunidades... Y me gustan las novelas que logran sorprenderme. Como ésta.

Any man of mine es la sexta de las novelas que componen la saga del equipo de hockey de los Chinooks. Da comienzo el día de la boda de Ty Savage y Faith Duffy, los protagonistas de Amor verdadero y otros desastres.
Autumn Haven es la organizadora del enlace y se reencuentra con su ex-marido, Sam, al que hace dos años que no ve. Se casaron seis años atrás en un loco y frenético fin de semana en Las Vegas, tras el cual Sam la abandonó y no volvió a saber de él hasta que le llegó la solicitud del divorcio. De ese efímero matrimonio nació un hijo, Conner, un niño de cinco años al que Sam no ve con mucha frecuencia -al menos en los dos últimos años- y sólo a causa de él tienen algún contacto.
A raíz del encuentro en la boda, Autumn y Sam vuelven a verse con cierta asiduidad. Sam está en mitad de la temporada con los Chinooks, a punto de emprender una serie de viajes que le obligarán a recorrer el país y le mantendrán alejado de Conner. De modo que quiere pasar con él todo el tiempo posible y eso implica que, inevitablemente, tendrá que ver a Autumn.

A raíz de esos encuentros Sam ha notado que Autumn parece no perder los nervios con tanta frecuencia en su presencia, incluso se amolda a sus caprichos cambiando sus planes y horarios para que él vea a Conner. Sam quiere pasar más tiempo con Conner y dejar de sentirse el padre que siempre que juró que no sería, uno sin tiempo para su hijo, tal como lo fue el suyo. Y, claro, eso significa también ver a su ex-mujer.
Autumn está bastante sorprendida del repentino interés que Sam muestra en pasar tiempo con Conner. Por una parte le alegra, por otra no cree que vaya a durar. Pero por el bien de su hijo incluso se muerde la lengua cada vez que ve a Sam y oye o soporta alguna de sus frivolidades y caprichos de superestrella del hockey.

Y a medida que el reencuentro se produce y repite, nos preguntamos qué sucedió entre ellos, cómo es que se casaron si parecen soportarse más bien poco. Así, se van intercalando saltos en el tiempo que nos trasladan seis años atrás, a Las Vegas, y conocemos con todo detalle lo acontecido aquel fin de semana. Pero al mismo tiempo somos testigo del cambio que va produciéndose en ellos y entre ellos. Porque de pronto todo el dolor que Autumn sentía parece no ser tan fuerte y porque Sam comienza a ver a Autumn con otros ojos.

Sam se pregunta a menudo por qué se casó con Autumn. Sencillamente no es su tipo, léase alta, delgadísima y pechos XXL. Lo achaca al alcohol y al momento en que se encontraron y, bueno, porque en Las Vegas puede pasar cualquier cosa.
Autumn no ha superado el rechazo y la humillación por el abandono de Sam con solicitud de divorcio y pruebas de paternidad incluidas. A diferencia de Sam ella se casó locamente enamorada, pero Conner es la persona más importante de su vida y si por él debe hacer un esfuerzo y tratar a su ex-marido con educación, madurez y corrección, así lo hará.
Lo malo es que Sam se parece menos al arrogante y vanidoso jugador de hockey con el que se casó y más a un hombre que parece querer formar parte de su vida.

A diferencia de otras novelas de Rachel Gibson en las que predominan las escenas divertidas y alocadas, en Any man of mine no abundan. Es una novela más sencilla, más “seria” que nos muestra a unos protagonistas que parecen despreciarse y entre los que no queda más que rencor y arrepentimiento. La relación entre ellos es en ocasiones tirante, incómoda. Pero -y eso es lo que en mi opinión hace de ésta novela singular- poco a poco se nos muestra como esos personajes nos desnudan facetas ocultas de sí mismos.
Lo cierto es que llega un momento en que puedes ponerte tanto en la piel de Autumn como en la de Sam. Creo que es una de las características de Gibson, y comprender un poco a ambos. De entrada confieso que es Autumn la que me ganó porque tiene un halo vulnerable y porque, realmente, es la que provoca más empatía, pero los protagonistas canallas como Sam tienen algo que, al final, logran conmoverte un poco.

No quiero contar qué sucede ni cómo evoluciona la relación de Sam y Autumn, pero basta con decir que me ha parecido una historia romántica en la que la paciencia, la fortaleza y la valentía son piezas clave en su evolución. Y, ¡cómo no!, Conner juega un papel vital. Además, y como es habitual en esta autora, es un niño que logra cautivarnos por su naturalidad, espontaneidad y dulzura.

La novela también cuenta con bastantes personajes secundarios a los que ya conocemos de otras novelas como Ty, Faith, Mark o Jules. Y tengo que destacar a Vince, el hermano de Autumn, un ex-marine grande y con cierto misterio a su alrededor cuya historia te provoca conocer cuanto antes.

En definitiva, para mí se trata de otra bonita novela de Rachel Gibson. Autora de la que me gusta leer todas sus novelas porque unas serán mejores, otras peores, pero siempre me dejan con mariposillas en el estómago. Como Any man of mine.
Una historia de segundas oportunidades, de madurez emocional, de perdón y, por supuesto, de amor.

sábado, 7 de julio de 2012

Annie Lash - Dorothy Garlock




















Annie Lash
Dorothy Garlock
Warner books 
1995



Con la muerte de su padre, Annie Lash Jester queda huérfana, pues su madre falleció años atrás. Enseguida una lista de pretendientes de avanzada edad, viudos desesperados de una mujer que críe a sus hijos o de características similares se agolpan a la puerta de su casa. Viviendo en St. Louis, cerca de la frontera, una región de hombres rudos donde la vida es todo menos fácil, pocas son las opciones para una joven soltera a la “avanzada” edad de veintidós años.
Annie Lash sueña en casarse por amor, así que rechaza a todos los pretendientes. Algunos no se lo toman demasiado bien y planean tomar represalias contra Annie. Pero la muchacha tampoco quiere ser una carga para Zan Thatcher, el viejo amigo de su padre que vela por ella desde que se quedara sola y se siente un tanto perdida.

Hasta que un día aparece ante su puerta un joven y atractivo colono llamado Jefferson Merrick, quien le hace una insólita proposición: contratarla para trabajar en su granja, a orillas del río Missouri, para facilitar la vida a su cuñada enferma, que debe criar a dos niños. Zan, que conoció al joven Jeff años atrás, exhorta a Annie a aceptar la proposición, no sólo eso, sino que comienza a representar el papel de casamentero, propiciando un acercamiento entre los dos jóvenes. Annie duda, pues desconfía de las verdaderas intenciones del hombre, pero Zan accede a viajar con ellos para conocer las tierras de Jeff,dar su aprobación y, sin ella saberlo, aprovechar cualquier ocasión que se presente para acercarlos.
Así, Annie, Jeff y Zan, junto a varios colonos más, emprenden el trayecto en dirección a St. Charles y las tierras de Merrick. Pero las tierras salvajes de Missouri son un terreno inhóspito, peligroso, rodeado de trampas y enemigos que acechan en cada recodo del polvoriento camino. Amenazados y perseguidos por indios hostiles, bandidos y enemigos políticos de Merrick, será un viaje que cambiará la vida de Annie Lash y Jeff.

Con Annie Lash continúa la serie del Oeste de Dorothy Garlock que dio comienzo con Wild sweet Wilderness. A pesar de que ambas novelas están relacionadas, considero que pueden leerse de manera independiente, puesto que en ésta apenas se mencionan a Berrie y Simon, así como los otros personajes que aparecieron en ella. Y lo cierto es que tampoco sucedió nada relevante que, por tanto, requiera del uno para el otro.
Sí he encontrado varias similitudes entre las dos historias. Principalmente y dejando de lado el lugar donde acontecen las aventuras y desventuras de los personajes, se repite un patrón: Annie Lash, como sucediera con Berrie, queda huérfana y queda bajo la protección de un rudo y misterioso hombre de la frontera. En este caso es Jeff Merrick.
Pero más allá de esto estamos antes dos historias muy diferentes, donde el nexo que las une es que las tierras de Jeff y las de Simon, están próximas, y se conocen.

La historia de Annie Lash y Jeff me ha parecido encantadora, conmovedora y muy dulce. Annie es una joven que ha soñado siempre en casarse por amor, pero las circunstancias ponen a prueba esa convicción, pues varias veces debe enfrentarse a la dura decisión de decidir o no casarse con un hombre que no ama ni la ama. Como su madre amó en su día, Annie desea lo mismo.
Pero no sólo son los tramperos de St. Louis, sino hasta el propio Jeff llega a proponerle que se case con él. Annie sabe que lo hace como un deber y aunque siente como poco a poco un sentimiento que la asusta pero emociona al mismo tiempo nace hacia él, se niega.

La novela está repleta de aventuras, peligros y escenas conmovedoras que recrean la vida de los colonos y el día a día en la región de la frontera. Un territorio peligroso, salvaje e indomable. Pese a que pudiera parecer de otra manera la novela no se centra en el trayecto desde St. Louis a las tierras de Jeff, así que no esperéis que nos cuente jornada tras jornada el avance de la caravana. Sólo abarca unos pocos capítulos hasta la llegada a la granja de Jeff.

¿Qué decir de Jeff? Jefferson Merrick se nos presenta como un hombre misterioso, hosco y un tanto desapegado. Tras años en el ejército, ahora sólo quiere trabajar sus tierras y hacer de la suya una granja próspera. Pero su pasado le ha llevado a hacer unos cuantos enemigos políticos que quieren verlo muerto, tanto a él como a Will Murdock, su amigo. Y así lo intentan en repetidas ocasiones cerca de su granja cerca del río Missouri, poniendo en peligro a Annie, su cuñada Callie y a los pequeños Amos y Abe.
Como en la anterior novela también hay una historia secundaria, la de Callie y Will. Callie está casada con el hermanastro de Jeff quien la abandonó un año atrás. Mientras Jeff estaba fuera Callie ha vivido con sus dos hijos y con dos antiguos esclavos a los que su cuñado ha liberado. Poco a poco Will y Callie han ido enamorándose, pero claro, ella es una mujer casada.
También tengo que mencionar a un personaje que a mí, personalmente, me ha tocado el corazón. No voy a contar por qué, hay que leer la historia. Hablo del viejo Zan Thatcher, un hombretón gruñón y un poco arisco pero con un gran corazón.

Y como es habitual en las novelas de esta autora, nos reconstruye un universo entrañable, pero también amargo, pues aun contando historias dulces no omite aspectos más crueles o tristes de la vida en el Oeste. A través de personajes curtidos como Jeff, Will o Zan nos ofrece otro tipo de héroes diferentes: esos sin galones, sin brillantes armaduras y cuantiosas fortunas. Hombres rudos y sin refinamientos.
A través de personajes como Annie o Callie nos presenta a mujeres fuertes y con agallas que no quieren depender de nadie sino aprender a valerse por ellas mismas.

Annie Lash es una historia real, humana, triste y bonita al mismo tiempo. Mentiría si dijera que es una novela dulce pues también hay situaciones que, al menos a mí, me han dejado con el corazón encogido. Pero aún con ese regusto un tanto agridulce en algún momento, creo que es una novela maravillosa que transmite emociones muy profundas como tantas y tantas de esta gran autora: Dorothy Garlock.

martes, 3 de julio de 2012

Miracles - Judith Mcnaught


















Miracles from Simple gifts (Anthology)
Pocket books
November 2001



Julianna está cansada de asistir a fiestas, reuniones sociales, de pasear coqueteando por el parque y, sobre todo, de sufrir la manera en que su madre trata de encontrarle marido colocándola en situaciones en las que ha llegado a sentirse avergonzada y desear que la tierra se la tragara.
Y, en el fondo, admite para sí misma, lo que más la deprime es que en realidad no desea casarse, sino ser independiente, vivir sola y... ser escritora.
Nada más que su abuela Sarah conocía esos sueños y, lo más importante, para ella, la entendía y alentaba a hacerlos realidad. Pero la ambiciosa señora Skeffington tiene otros planes y esa noche la arrastra a otra reunión.

Tratando de huir de verse humillada ante otro posible candidato a convertirse en su futuro marido, Julianna se escabulle de la casa y se adentra en el jardín de la propiedad donde se celebra la fiesta. Es allí donde la encuentra Nicholas Du Ville, sentada sola en un banco y llorando.
Como el caballero que es acude a socorrerla y eso gesto cambiará la vida de los dos.

Julianna y Nicholas ya se habían visto con anterioridad, en otras de las intentonas de su madre por atraer a uno de los solteros más codiciados de Londres. Fue en un paseo “casual” en el parque y la impresión que se llevaron el uno del otro no fue muy buena. Pero esa noche, en el laberinto de setos donde se encuentran, Julianna que está un poco bebida no lo reconoce al principio y Nicholas la toma por una cortesana. Su sorpresa es mayúscula cuando la llorosa damisela le pide su colaboración para ser deshonrada.
Pues Julianna ha llegado a la convicción de que si es deshonrada ningún hombre querrá casarse con ella. Lo que sucede es que Julianna, que es extremadamente ingenua, no sabe muy bien ni con certeza que implica esa deshonra. Pero Nicholas, solícito, la insta a acompañarlo a su dormitorio y a partir de ahí los planes de uno y de otro sufren un cambio inesperado con un resultado que no hace feliz a ninguno de los dos.

Miracles es la cuarta novela, aunque en realidad es una novela corta, de la saga de los Westmoreland. Fue en Cuando tu llegaste/Pasajes al corazón donde conocimos a los que son los protagonistas de Miracles. Fue un encuentro un tanto accidentado que hacía presagiar una maravillosa y emotiva novela de Judith Mcnaught.
He leído dos veces esta historia y, sinceramente, la primera vez me decepcionó un poco. No porque la novela no sea bonita ni despierte los sentimientos como sólo esta autora es capaz, sino porque me pareció demasiado corta y notaba de una manera angustiosa que me faltaban páginas. Tanto fue así que no pude desprenderme de la sensación de ser una historia un poco apresurada.

Pero tras volver a leerla, reconozco que esta vez me ha gustado más. Sigo pensando que es una lástima que no se haya escrito una novela larga. En mi opinión Nicholas y Julianna son una pareja con tanta química que seguramente habría sido una novela maravillosa.
Sin embargo, pese a que sigo pensando que merecía una historia más desarrollada y sigo teniendo la sensación de que transcurre de manera muy brusca, creo que es una bonita historia.

Creo que es un poco irremediable que cualquiera que la lea piense que la de Nicholas y Julianna daba para más.
Después de todo ambos son conocidos de aquellas que hayan leído Tú eres mi amor y, sobre todo, Cuando tú llegaste/Pasajes al corazón.

Cuando Sheridan, la protagonista de Cuando tú llegaste/Pasajes al corazón, trabajó como institutriz para la familia Skeffington conoció a Julianna y se hicieron amigas. Más tarde, gracias a ello, se convirtió en la protegida de Whitney y Sheridan y, por ende, de los hermanos Westmoreland, lo que le abrió las puertas a las salas y mansiones más exclusivas de Londres. Con tales hadas madrinas, la señora Skeffington cree que sólo es cuestión de tiempo y un poco de ayuda atrapar a un buen partido.
Nicholas Du Ville, amigo de Whitney y Sheridan, se convierte en uno de los posibles candidatos.

A primera vista Julianna pudiera parecer una jovencita más ávida por encontrar marido. Su gran belleza la convierte en una pieza codiciada, a pesar de que los Skeffington no poseen un título nobiliario de mucho rango, el señor Skeffington es nada más que un barón y no gozan de una gran posición económica. Pero peor que eso es que Julianna es una joven un tanto peculiar, le gusta la filosofía, la poesía y sueña con ser escritora. Algo que muy pocos saben y su madre le insta a ocultar.
El encantador Nicholas Du Ville es uno de los solteros más codiciados, a pesar de que su fama como mujeriego le precede. Muchas de las jóvenes casaderas sueñan con ellas quienes atrapen al esquivo noble.

Lo cierto es que con estos precedentes es fácil caer en la pregunta ¿y por qué no una novela larga para ellos?

Pero como lamentarse -aún más- tampoco sirve para nada, reitero lo dicho antes. A pesar de que me apena profundamente que se trate de una novela tan corta y a pesar de contar con una trama que en algún momento peca de ser apresurada, es una bonita historia. He vuelto a sentir esas profundas emociones que tiñen las novelas de Judith Mcnaught, me ha conmovido leer como Julianna confiesa su amor por Nicholas con esas frases que brotan del corazón y te llegan al alma, me ha emocionado la entrañable figura de la abuela Sarah que ha dibujado una sonrisa en mi cara con algunas de sus reflexiones y me ha encogido el corazón como los malos entendidos tan característicos de Mcnaught han sembrado la duda en Nicholas y hecho sufrir a Julianna y, con ella, a nosotras.

Así que, en una dosis menor, un poco apresurada y sin que pueda dejar de lamentar que sea de ese modo, Miracles me ha parecido una bonita historia que aun con sus defectos y carencias me ha llegado al corazón. Y al llegar a la última página, en ese precioso epílogo, confieso con sinceridad que me ha dejado con una sonrisa en los labios.
Pero sí, de nuevo insisto ... ¡¡qué pena que no se trate de una novela larga!!

viernes, 29 de junio de 2012

White lion's Lady - Tina St. John




White lion's Lady
Tina St. John
Ballantine books 2001

White lion's lady es una novela de caballeros -la primera de una trilogía medieval- que nos adentra en una época histórica convulsa en la que las lealtades cambian de bando, las tierras y títulos son comprados a cambio de pactos y apoyos a la corona o sus enemigos.

Cuando la novela comienza, Inglaterra, gobernada por el rey Ricardo, se divide entre quienes le son leales y quienes conspiran en su contra. En mitad de esta encrucijada de alianzas y traiciones, de caballeros y vasallos, nace la historia de amor de Isabel de Lamere y Griffin de Droghallow.

Para poner en antecedentes cabe mencionar que, años atrás, durante el reinado de Enrique II, el señor de Lamere fue acusado de traición. En reprimenda fue desprovisto de sus tierras, títulos y privilegios y, por supuesto, sentenciado a muerte. Su matrimonio fue anulado, sus hijas proclamadas ilegítimas. La esposa, rota de vergüenza y dolor, regresó a su Francia natal donde ha ido consumiéndose poco a poco.
Ahora, tras su muerte, Isabel de Lamere ha heredado sus propiedades.

Corre el año 1189 y el rey Ricardo decreta que los feudos de Lamere y Montborne se unan. Así, Isabel abandona el convento en el que ha vivido recluida durante años para cumplir con las órdenes de su rey. Poco valor tienen los deseos de una joven, menos aún el de una cuyo padre fue acusado de traición a la corona. Pero a Isabel la mueve el deseo de reunirse con su hermana menor, Maura, a la que no ve desde que fueran separadas y enviadas a conventos diferentes. Y eso es lo más importante para ella.

Cuando emprende el viaje que la llevará a conocer a su prometido, Sebastian de Montborne, y contraer nupcias, es secuestrada por una guarnición de hombres enviados por el propio príncipe Juan para impedir el matrimonio.
Entre ellos se encuentra Griffin de Droghallow, a quien en principio no reconoce, pero de quien ha conservado un viejo medallón desde que, años atrás, cuando era nada más que una niña, le salvara la vida. Desde entonces ha idealizado a aquel valiente joven que le juró que un día sería caballero para defender a los débiles.

En su fuero interno Griffin no desea ser el héroe de nadie, mucho menos el de Isabel que, absurdamente, ha hecho de él un caballero de brillante armadura cuando bien lejos está de serlo. Pero cuando es traicionado por el hombre al que ha protegido como a un hermano y al que ha rendido cuentas, aun en detrimento de su honor, no duda en esbozar sus propios planes para luchar la libertad que tan duramente ha luchado por conseguir. Pero eso puede significar perder a la única mujer que se le ha metido bajo la dura coraza con que se ha revestido.

En Griffin encontramos a un caballero desengañado, sin esperanzas.
Fue abandonado cuando era un recién nacido y tomado bajo la protección del señor de Droghallow quien lo entrenó y lo trató casi como a un hijo. No había nada más valioso para él que el honor y la lealtad. Juró fidelidad a Robert de Droghallow y juró que un día sería un caballero de intachable honor. Pero ahora, años más tarde, poco queda de aquel muchacho orgulloso y de los principios en los que se sustentaba.

Las novelas ambientadas en el medievo tienen algo que me atrae, por ello al saber que White lion's Lady transcurría en esa época histórica me animé a leerla. Eso y el que tras el pseudónimo de Tina St. John no está otra que Lara Adrian.

White lion's Lady es, desde mi punto de vista, una apasionante y bonita historia que entrelaza intrigas, secretos y amor. Me ha sorprendido la pareja protagonista, Isabel de Lamere y Griffin de Droghallow, pues distan bastante de los típicos personajes que asociamos a estas novelas.
Isabel es una joven que ha sido desprovista de su nombre, posición y privilegios, y recluida en un convento. Griffin de Droghallow es casi un mercenario que no conoce su verdadero nombre y que ha visto como poco a poco, año tras año, su alma se iba oxidando e iba perdiendo esa honorabilidad que lo era todo para él.

Me es muy difícil describir qué me ha transmitido esta maravillosa novela. Me ha parecido una historia muy bonita, pues desde el prólogo, en ese primer encuentro entre Isabel y Griffin, cuando son unos niños, me atrapó profunda e irremediablemente.
Más aún al descubrir el marcado contraste entre los pequeños Isabel y Griffin y los adultos. La necesidad de desvelar los interrogantes que rodean esa gran laguna que el tiempo ha creado me impelía a seguir leyendo.
Cómo no sentir curiosidad por descubrir que ha propiciado esos cambios y, sobre todo, como dos personas que no son nada más que peones en esta red de traiciones y secretos pueden salir indemnes y proteger ese amor tan frágil que los une.

Sin excederse con explicaciones y relatos históricos, la autora delinea una época y unos hechos que son el marco en el que nace el amor de Isabel y Griffin. Y combinando algunos rasgos tan atractivos como un héroe con un alma atormentada y una protagonista valiente y de buen corazón, da pie a una bonita historia que transcurre en una época apasionante.

Hacía mucho que no leía una novela medieval de este estilo. Un estilo que tal vez no se exceda en detalles que hacen de ella una historia del todo realista pero sí esboza cómo era la época y que vicisitudes rodean a esta pareja que deberá enfrentar mil y un obstáculos. Pues no se puede olvidar que Isabel está prometida a otro y que Griffin es considerado un traidor a la Corona, pues formó parte de la guarnición de hombres, aliados con el propio príncipe Juan, que han secuestrado a la heredera de Lamere. Esos se convierten en grandes obstáculos a superar.

Me ha emocionado como, capítulo tras capítulo, la coraza que rodea a Griffin se ha ido resquebrajando, y como la desconfianza de Isabel desapareciendo. Después de todo, en su corazón, sabe que ese hombre endurecido que dice haber perdido su honor es aquel muchacho al que convirtió en su caballero de brillante armadura.

Puede que White lion's Lady no pase a ser una de esas novelas que pasan a formar parte de las grandes historias de amor ambientadas en el medievo, pero es desde mi punto de vista una bonita historia que te cautiva, tanto los sentimientos que provoca, como por la época en que acontece, envuelta en aventuras e intrigas. Así, al menos para mí, es imposible no caer derrotada ante el asedio del león blanco y su dama en la que es para mí una bonita y emocionante novela.

miércoles, 16 de mayo de 2012

About that night - Julie James






















About that night
3º FBI/US Attorney series
Berkley sensation
April 2012


Cuando Rylann Pierce, la nueva ayudante del fiscalía del distrito de Chicago, y Kyle Rhodes se encuentran en la sala de juicio hay algo latente entre ellos. Y no por una cuestión legal ni judicial. Es algo que no pasa inadvertido para los ojos más atentos y perspicaces. Pero, en realidad, nadie conoce su historia porque ese día en el juicio no es la primera vez que se ven.
Fue años atrás, mientras estudiaba en la universidad, cuando una joven y ambiciosa Rylann conoció al hijo del billonario informático más célebre del país. Ni siquiera el carácter inquisitivo y un poco férreo de Rylann, que ya entonces tenía las ideas muy claras de lo que quería hacer con su vida, lograron ahuyentar a Kyle que, tras un arduo esfuerzo y pulla verbal incluida, la invitó a cenar.
Rylann aceptó, pero al día siguiente Kyle no se presentó.

Pese a ello, cuando nueve años después vuelven a encontrarse, Rylann como representante de la fiscalía, Kyle como el acusado y ex-presidiario, la atracción surge de nuevo.
Ahora, las vidas de ambos son muy diferentes aunque, tal vez, en el fondo no han cambiado demasiado. Rylann sigue teniendo las ideas muy claras y, tras romper con su novio, está muy centrada en su carrera.
Kyle acaba de salir de la cárcel, está un tanto a la deriva, necesita reorganizar su carrera y, teniendo en cuenta que la última relación que tuvo fue la causa de que terminara en prisión, tampoco tiene planes de iniciar otra.

Por ello cabría suponer que ni uno ni otro tiene tiempo ni interés en aventurarse en una relación, pero también es cierto que “sobre aquella noche” quedaron muchas cosas pendientes, no sólo aquella cena. Ahora, nueve años después, tal vez es el momento de solucionarlo.

Fue en A lot like love donde conocimos a Kyle Rhodes, el hermano gemelo de Jordan y, también, el preso conocido como “el terrorista de twitter”. De manera indirecta representó un papel importante en la historia de Jordan y Nick, puesto que fue su ingreso en prisión y posterior liberación, a cambio de la colaboración de su gemela con el FBI, lo que propició que Nick y Jordan se conocieran. En realidad Kyle era nada más que un personaje secundario que ya deslumbró, pero ahora, por fin, toma pleno protagonismo para nuestra fortuna.

Tenía mucho interés en leer esta novela, no sólo porque Kyle me conquistó en A lot like love como el díscolo gemelo de Jordan, sino por todo cuanto rodea a su detención y paso por la cárcel. Era evidente que requería un libro, pero no sólo por eso, sino porque en About that night nos encontramos con una novela de reencuentros y segundas oportunidades.

Con el humor e ingenio que caracterizan a las novelas de Julie James, nos cuenta una historia romántica donde las haya, con ese punto ácido e irreverente que tienen algunos de sus protagonistas. Como Rylann.
Apodada acusadoratrix Pierce por parte de Rylan, al que a su vez se conoce como “terrorista de twitter”, nos da una pista de lo implacable y determinante que es en los juzgados. Bueno... también fuera de ellos.

Rylann ha programado meticulosamente los pasos a seguir para lograr establecerse con éxito en la fiscalía del distrito. Su traslado a Chicago le abre las puertas a aquello por lo que ha luchado durante toda su vida. No quiere distracciones. Lo que no imaginaba era que al llegar a Chicago se reencontraría con Kyle Rhodes, al que conoció en la universidad. Y si ya entonces era demasiado guapo para su propio bien... ahora es sencillamente letal.
Kyle nunca ha sido un hombre de relaciones duraderas. La que más duró fue con su última novia, a resultas de la que acabó en prisión. Algo poco alentador. Pero cuando se reencuentra con Rylann, la única mujer a la que no ha podido olvidar, se percata que preparado o no, ni puede ni quiere dejarla escapar.
Sin embargo, la negativa notoriedad que persigue a Kyle y el conflicto ético que supone que uno de los delincuentes “más peligrosos” se relacione con la ayudante del fiscal se interponen también entre ellos.

Me encanta el estilo de esta escritora. Ágil, ingenioso, divertido. Sabe imprimirle la dosis justo de sentimiento para que a pesar de las pullas, apodos y diálogos irreverentes, situaciones un tanto ridículas, notes que estás ante una historia de amor preciosa.

Lo cierto es que con esta autora me ha pasado algo curioso. Veréis no soy muy partidaria de que al leer una novela me dibujen a sus personajes hasta el punto que les pongan cara, que se parezca a tal o cual actor. Mientras leo me gusta imaginarlo. Pero a pesar de que a Kyle lo apodan “Sawyer” desde A lot like love, por su parecido con el actor de una serie, ese hecho me ha divertido mucho y ha sido una de las bazas con las que me ha ganado. En sí la novela está llena de apodos: Sawyer, terrorista de twitter, hoyuelos engreídos o acusadoratrix Pierce...

En cuanto a la trama romántica en sí, debo decir que la historia de Rylann y Kyle me ha gustado muchísimo. El que se conocieran en la universidad pero a causa de un hecho muy trágico se separaran y, nueve años después, volvieran a encontrarse ha hecho que la novela me llamara la atención, más si cabe. Tampoco es que necesitara más alicientes, pero tengo especial debilidad por las novelas de reencuentros y segundas oportunidades.

Entre los personajes secundarios tengo que destacar a Jordan y Nick, cuya relación se afianza más, de manera que Jordan trata que su novio y su hermano (que no siente gran aprecio por él después de que pusieran en peligro a su hermana) estrechen lazos. Me he divertido mucho con estas reuniones familiares para confraternizar, con las pullas que se lanzan Nick y Kyle, con las conversaciones “con los ojos” entre los gemelos... Lo cierto es que la novela me ha resultado muy pero muy divertida.
Especial mención debo hacer también para Cameron, jefa de Rylann, y Jack, cuya relación también se afianza.

En definitiva, en About that night además de contarnos la esperadísima historia del guapísimo Kyle con la férrea ayudante del fiscal Rylann, nos reencontramos con todos los personajes, abogados y agentes del FBI, que protagonizan esta fantástica saga.
Además la novela nos esboza una historia secundaria, la de la mejor amiga de Rylann.

No sólo esta novela, sino toda la serie se ha convertido en una de mis favoritas por su ingenio, romanticismo, porque cuentan historias divertidas y amenas, porque sus protagonistas te emocionan y te hacen reír y, simplemente, te hacen pasar un buen rato.
Sí, son historias sencillas que no tienen grandes aderezos, no tienen una narrativa muy descriptiva, pero los diálogos, magistrales en mi opinión, son más que suficientes para mantenerte pegada a sus páginas.

Confieso que aunque no lo esperaba porque Nick McCall me conquistó con su arrogancia y oscuro atractivo, Kyle se ha ganado mi corazón porque es un hombre nada vanidoso, un frikie informático que resulta muy tierno, leal y muy romántico. En fin, que como se desprende de mis palabras, About that night me ha parecido otra excelente novela de Julie James.
¡¡Ojalá publique pronto otra novela más!!

jueves, 12 de abril de 2012

In the Dark - Marliss Melton















In the Dark (Black Ops-2)
Forever
2005


Hannah Geary , una agente de la DIA, es una mujer fuerte y decidida, que quiere vengarse del Comandante de los Seals que ha traicionado a sus hombres , a ella y además ha asesinado a su compañero de la agencia; cuando encuentra las pruebas que necesita para acusarlo y de paso liberar a Gabe “Jaguar” ( el protagonista de la anterior novela, Forget me Not) acusado de traficar con armas, delito cometido por su propio jefe, acaba prisionera en una prisión cubana.
Luther Lindstrom, es un Navy Seal del equipo de Jaguar que está haciendo todo lo posible para ayudar a su compañero, y eso incluye entrar en Cuba y liberar a la agente que tiene las pruebas que incriminan al Comandante traidor.


Luther acaba de romper el compromiso con su prometida después de averiguar que le estaba siendo infiel y en estos momentos no tiene ninguna fe en las mujeres; pero eso es antes de conocer a Hannah, la cual le hace soñar de nuevo con una familia, una casita con valla blanca y una relación larga y feliz.

Hannah perdió a sus padres, ambos agentes de la CIA en un supuesto accidente de aviación y desde entonces todos sus sueños pasan por seguir sus pasos, recorrer el mundo como agente encubierta y vivir aventuras que hagan de éste un mundo mejor; pero eso es antes de conocer a Luther, el cual le hace replantearse si esos sueños son lo que verdaderamente quiere, o si solamente está tratando de vivir la vida que les fue arrebatada a sus padres.

Aunque el suspense no es para comerse las uñas porque es bastante predecible quién es el malo de la película, es lo suficientemente bueno para que no puedas dejar de leerla; la relación entre ellos es muy bonita, ambos luchando contra unas ideas preconcebidas sobre lo que quieren en la vida y sobre si el amor que se tienen será suficiente para cambiarlas.

Hay más tensión sexual que escenas tórridas, lo que me gusta bastante, porque sinceramente algunas autoras basan toda la trama en el número de veces que se van a la cama ( o a cualquier otra pieza del mobiliario...)

Y finalmente, la aparición de personajes de Forget me Not, como Sebastian y Leila, cuya historia de amor se resuelve por fin en esta novela y también nos deja entrever cuál va a ser el protagonista de la siguiente Time to Run: Westy McCaffrey, un personaje que promete.

Esta serie me recuerda un poco a los Seals de Suzanne Brockmann, son del mismo estilo aunque las de Brockmann me parecen más elaboradas; aún así yo os la recomendaría si queréis pasar un rato entretenido sin romperos la cabeza.

lunes, 2 de abril de 2012

Rainshadow road - Lisa Kleypas


















Rainshadow road (2º Friday Harbor)
Lisa Kleypas
St. Martin's Griffin
February 2012


Lucy Marinn es una joven artista del vidrio que se traslada a Friday Harbor por amor. Pero la relación con su prometido no era tan sólida como creía. Después de dos años viviendo juntos, un día Kevin da por terminada la relación. En un principio son varias las razones que esgrime, principalmente la personalidad de Lucy, pero, a la fin, se trata de otra mujer. Una mujer que no es otra que Alice, la hermana de Lucy.

Aturdida y con la autoestima por los suelos, Lucy desea abandonar Friday Harbor cuanto antes. Si ya le resulta de por sí doloroso que Kevin la deje por su propia hermana, el tener que verlos y encontrarlos en cualquier parte ya sería demasiado. Pero sus amigas Justine y Zoë la convencen para que se vaya a vivir a la posada que ellas regentan durante unos días, antes de tomar una decisión. Lo cierto es que las primas aprecian sinceramente a Lucy y quieren que se quede. Es durante esos días cuando conoce a Sam, el mediano de los hermanos Nolan.

A pesar de tener conocidos en común, como Justine, Zoe o el mismo Kevin, los caminos de Sam y Lucy no se habían cruzado antes.
Lucy, que duda de sí misma y se replantea su culpa en la ruptura con sólo con Kevin, sino con anteriores parejas, no desea comenzar una relación con nadie. En su futuro más inmediato no hay lugar para ningún hombre. Sam, un soltero convencido que huye despavorido de las relaciones largas, no puede hacer nada para evitar la atracción que despierta en él Lucy. Viéndola herida y vulnerable, siente la inexplicable necesidad de protegerla cuando tiene oportunidad, aunque él tampoco desea nada más que una relación temporal y sin ataduras.

Pero primero la intromisión de Kevin, que le pide a Sam que salga con Lucy para ayudarla a superar la ruptura -y de paso ayudar a que sus suegros dejen de detestarlo si Lucy rehace su vida- y más tarde un accidente, acercan a Lucy y a Sam de nuevo.

Rainshadow road nos lleva de regreso a la pintoresca y acogedora Friday Harbor para, en esta ocasión, narrarnos la historia de Sam Nolan.
Ya en la novela anterior supimos que Sam es el hermano que vive dedicado a sacar adelante sus viñedos. Sueña con que algún día los viñedos de Sam Nolan produzcan su propio vino. Desde que comenzó el negocio y se trasladó a la vieja y destartalada mansión victoriana que hay junto a las tierras, no ha tenido tiempo para las mujeres. La llegada de Holly y de Mark -que siguen viviendo con él- tampoco ha propiciado que tenga tiempo ni oportunidad de salir mucho, menos con mujeres. Sin embargo, desde que ve a Lucy por primera vez siente algo especial por ella. Y cuando sin saber muy bien cómo, ella acaba viviendo durante unos días en su casa mientras se recupera del accidente sufrido, la intimidad entre ellos se hace mayor; lo que hace más difícil luchar contra sus sentimientos.

Me gustó mucho Una noche mágica, debo empezar diciendo eso, y Rainshadow road me ha gustado también muchísimo. La sensación que me ha quedado al terminar la novela es dulce, cálida y... mágica.
También rodeada, en cierto modo, por un aura a cuento de hadas, en mi opinión es una historia inolvidable, romántica y entrañable en la que la familia, la fe y la capacidad de recuperación de una persona son puntales básicos de esta novela.
Además de contar lo que es, desde mi punto de vista, una historia de amor muy bonita, nos adentra en el corazón de Sam y de Lucy para ser testigos de cómo sanan y crecen emocionalmente. Aunque sus heridas no implican temas tan crudos como en la saga de los Travis, donde se abordan temáticas más duras, también está presente esa evolución que sufren los protagonistas a causa de vivencias del pasado. Y es algo que a mí, particularmente, me ha atrapado desde la primera página y embelesado de Lisa Kleypas como escritora de romántica contemporánea.

La dura vida de los hermanos Nolan ya nos fue explicada en Una noche mágica. Son hijos de padres alcohólicos y nunca han sentido que pertenecían a una familia. Hasta que llegó Holly y, poco después, Maggie.
Además vamos viendo cómo es la vida de Mark, Maggie y Holly tras el fin de la novela anterior. Algo que a mí me encanta, pues me gusta que protagonistas de novelas anteriores no desparezcan.
Pero aún viendo cómo Mark ha logrado superar su miedo al compromiso, Sam no cree que él sea capaz.

La vida de Lucy no es bastante desconocida evidentemente. Sin embargo los primeros capítulos de la novela nos narran su infancia, que estuvo marcada por la enfermedad que Alice sufrió de niña. Después de eso Alice se convirtió siempre en la débil, la hija a proteger y los celos y la inseguridad marcaron la relación de las hermanas. En el presente la de ellas sigue siendo una relación difícil, más aún cuando Alice le roba el novio a Lucy. Por supuesto.

Con todo este bagaje, en una vieja casa que los hermanos Nolan van remodelando, con una sobrina de siete años que les ha robado el corazón y quieran o no les ha cambiado la vida, con un hermano a punto de casarse, con otro recién divorciado y con graves problemas, incluso con la presencia del peculiar perro Renfield -sin olvidar a un exnovio entrometido y una hermana que siempre parece quitarle todo- y a toda una comunidad donde todos se conocen, nace la historia de Sam y Lucy.
Lo cierto es que la historia me ha parecido sencilla, envuelta en la cotidianidad del día a día, pero creo que es muy dulce y romántica. Diría también que es entrañable. Y de nuevo la magia está muy presente, claro que en esta ocasión no de un modo tan metafórico como en Una noche mágica.
No quiero entrar en demasiados detalles, pues ni son relevantes ni es menester desvelar más información de la necesaria, pero sí es cierto que es algo que me ha sorprendido. No sospechaba nada similar, en realidad esperaba una historia con personajes comunes y corrientes. Pero pese a todo, tengo que confesar que no es algo que me haya fastidiado la lectura. Creo que no es algo relevante, sino algo que puede pasar como una mera anécdota y no deja introducir una pizca de magia y fe en los personajes.

Mi opinión es que aun manteniendo el espíritu y el estilo sencillo, cotidiano y soñador de Una noche mágica, estamos ante una historia un poco más desarrollada. En el sentido que es más extensa. De hecho tengo la sensación -no sé si es imaginación mía o no- que ya se vislumbra algo de la historia de Alex, el menor de los hermanos Nolan, siempre envuelto en un halo de hastío, soledad y pesimismo que acongoja. Personaje por el que desde la primera novela siento una debilidad especial.

Poco más puedo añadir sin caer en el riesgo de contar puntos importantes de Rainshadow road. Es una novela que a mi parecer destila dulzura, sensibilidad y romanticismo. Una historia de amor entrañable, inolvidable. Sencilla, sí, pero de ésas que calan muy fácilmente porque sus personajes son tan humanos y reales que traspasan el papel. Humana porque cuenta vivencias reales, aunque Lisa Kleypas las envuelve de magia y fe.

Antes de acabar, como siempre que comento una novela de Lisa Kleypas, me siento obligada a añadir que a mí siempre me gustan sus novelas. Todas me han gustado. Claro, unas más que otras. Soy incondicional. Pero, ciertamente, esta nueva saga contemporánea me está encantando. Es más dulce que la de los Travis, tal vez por ese halo como de cuento que la rodea, tal vez porque destila magia en un sentido un tanto irreal. A mí me tiene totalmente enganchada. Es una historia con la que es fácil evadirse leyendo y que he terminado con una sonrisa en los labios.